Arte Gótico

La evolución del arte Románico nos ofrece el arte Gótico. Su nombre se debe al pintor manierista Giorgio Vasari que alude a este estilo como "gótico" al considerarlo de origen germánico y propio de godos, acentuando el aspecto despectivo de este arte anterior al Renacimiento. Cronológicamente el Gótico desde los últimos años del siglo XII hasta entrando el siglo XVII. El núcleo originario estaría en la Isla de Francia con Saint Denis de Paris y la catedral de Sens, hacia el 1125. A pesar de ser una continuación del Romanico , en el Gótico se aprecian actitudes diferentes e incluso opuestas. Si el Románico es recogimiento, oscuridad, predominio de masas sobre vanos, el Gótico implica todo lo contrario, luz, color, elevación, naturalidad, expresismo... El abad Suger, promotor de la construcción de Saint Denis, recoge en sus pensamientos estas ideas que recogen en su perfección el cambio sustancial que conlleva este estilo artístico, cambio que también se produce en la sociedad y en la economia.

Fachada de la Basilica Saint Denis en Paris

Interior de la Basílica Saint Denis

El monumento donde el Gótico alcanza su mayor explendor es en la catedral, lugar donde sienta cátedra el obispo. Es un edificio urbano y con esa concepción se levanta. Los cambios constructivos más importantes se manifiestan en la bóveda cruceria y arbotante. La bóveda de cruceria - derivada de la artista-  logra localizar sus empujes sobre cuatro puntos de arranque lo que permite cubrir todo tipo de  espacios. El arbotante es una especie de puente que transmite las presiones desde el arranque de las bóvedas hasta los ligeros contrafuertes del exterior, permitiendo abrir mayores vanos en la fábrica del edificio. El arco apuntado, gracias a tu verticalidad, permite elevar la altura del edificio. Con estos tres elementos los arquitectos góticos revolucionan la construcción. La planta del templo gótico experimenta cambios especialmente en la zona de la cabecera ya que las capillas, los ábsides y las girolas dejan de ser semicirculares para hacerse poligonales. La tribuna románica se convierte en el triforio, simple galería a traves de los pilares. La bóveda de crucería motivará la utilización de gruesos pilares con columnas adosadas o simples molduras que recuerdan a las columnas. Otra importante diferencia se muestra en la decoración al ser el gótico mas austero como respuesta a la reacción que implica la orden del Cister. Por lo demás se trata de una planta de cruz latina con su número impar de naves  - generalmente tres pero es posible también que tengan cinco-  con la nave mayor mas elevada y las laterales con alturas decreciente. Las puertas de acceso al templo suelen colocarse en los brazos y pies de la cruz, continuando con el abocinamiento románico solo que ahora los arcos son apuntados. Los tímpanos continuan siendo decorados aunque ahora se distribuyen las figuras en zonas horizontales mientras que las figuras de los arquivoltas se disponen en sentido de la curva. La forma apuntada de la portada suele completarse con el glabete o moldura angular que la corona. Sobre la portada encontramos el rosetón que aporta iluminación y cromatismo al interior del templo. Al existir mayor espacio de piedra, las ventanas adquieren mayor importancia y en el interior de los vanos se aprecian tracerías caladas que se rellenan con vidrieras policromadas. Pero quizás lo que resulte más destacable es la altura alcanzada por los arquitectos en sus construcciones.

El Gótico, como todos los estilos artísticos, ofrecen variantes regionales. Como ejemplo podemos hablar de la escuela francesa  donde destacan las catedrales de Notre-Dame de Paris, Sens, Chartes, Laon, Reims y Amiens o la Saint-Chapelle, levantada por san Luis; la española con la catedral de Leon, Burgos, Toledo, Gerona, Barcelona o Sevilla; la portuguesa con los monasterios de Belem y Bataltha o la iglesia de la Orden de Cristo en Thomar; la alemana con las catedrales de Colonia, Estrasburgo o Ulm; la iglesia con las catedrales de Gloucester, Salisbury o Lincoln; o la escuela italiana, más particular e incluso reaccionando en ocasiones contra el gótico tradicional como en la catedral de Santa Maria de las Flores en Florencia, mientras que en la catedral de Milan es más cercana al gótico europeo.

Debemos hacer una mención especial a los edificios civiles que se desarrolan en el periodo gótico siendo buenos ejemplos el ayuntamiento de Bruselas y Lovaina, la lonja de Los Paños de Ypres o las de Palma y Barcelona, el espacio de la Signoria de Florencia o el de Dux de Venecia, o el castillo de Bellver en Mallorca.

La escultura gótica esta definida por el interés hacia la naturaleza manifestado por los artistas. Conserva el carácter monumental y grandioso de la herencia románica pero las figuras estan dotadas de mayor expresividad, abandonando la deshumanización. Ahora reflejan sentimientos y la Virgen y el Niño dialogan mientras que el crucificado se retuerce de dolor. Este afán expresivo llevará al artista gótico a interesarse por la anécdota y lo secundario, tratando en ocasiones lo satírico y lo obsceno.


Podemos hablar de varias etapas en el desarrollo escultórico del Gótico, siendo la primera de composiciones grandiosas y claras, con escasos pliegues angulosos en los ropajes. A mediados del siglo XIV las figuras se hacen mas alargadas y aumentan las curvas, especialmente en los ropajes. Ya en el siglo XV encontramos cierta reacción hacia las curvas y la figura humana que hace más naturalistas, convirtiéndose los rostros en auténticos retratos. En el relieve se introduce el paisaje hacia el siglo XV. Las escenas y figuras siguen decorando portadas y capiteles , pero ahora se incorporan los retablos, sillerías de coro y sepulcros, siendo en estos lugares donde la escultura gótica alcanzará su punto culmimante.

Debido al escaso desarrollo del muro, la pintura gótica tiene su primera ubicación en las vidrieras y en las miniaturas de los códices. Este primer estilo se denomina Lineal ya que manifiesta una especial atracción hacia las lineas que definen los contornos. El Gótico Lineal abarca todo el siglo XIII y los comienzos del XIV momento en el que se desarrolla un nuevo estilo llamado Gótico Italiano donde las escuelas de Siena - con Duccio, Simone Martini y los Lorenzetti- y Florencia -donde destaca la figura de Giotto, verdadero procursor del Renacimiento- alcanzan cotas sublimes. Gracias al desarrollo económico y la ploriferación de gremios que compiten en la decoración de sus capillas se produce un importante auge en la pintura. A finales del siglo XIV se desarrolla el estilo Internacional donde las influencias italianas se funden con las francesas y flamencas, obteniendo más que importantes resultados. Durante el siglo XV dos regiones incorporarán fundamentales aportaciones a la pintura, abandonando el estilo Gótico y acercándose al Renacimiento: Italia, donde se desarrola el Quattrocento y Flandes, donde la pintura flamenca aporta grandes dosis de realismo y detallismo.